Es posible que con este artículo algunos «culés» se molesten conmigo por defender al eterno enemigo así como madridistas acérrimos que les moleste que sea del Barça a pesar de elogiar a su máxima estrella.
Quiero ir a lo profundo de todo esto:
Parto de la base de que inevitablemente Cristiano Ronaldo me da rabia, asco… ¿cómo no? Van ya unos cuantos años en donde cada vez juega menos partidos, se tiene que reservar, casi no se va ya de nadie, no tiene esa velocidad de vértigo que tenía hace años, casi nunca dispara ya desde fuera del área, pero sin embargo, cada vez es más decisivo, ¿cómo se come esto?
Además, tiene gestos y declaraciones que denotan ser arrogante, chulo… ok. Eso está a la vista de todos.
Pero dejando de lado ese asco que me pueda dar por ser el máximo rival o por cómo se comporta en ocasiones, está luego el análisis objetivo que se le pueda hacer.
Quizás esté loco, pero dentro del asco que me pueda dar, en ocasiones me resulta entrañable. Cuando en partidos como el de ayer contra la Juventus, Cristiano estaba desesperado, agitaba los brazos como un niño caprichoso y engreído cuando no le pitaban una falta, que por momentos su rostro se llenaba de miedo, de impotencia… transmitía ser muy vulnerable, muy humano. ¿Cómo alguien tan chulo y prepotente puede también mostrarse por instantes tan débil y vencido?
Pero al mismo tiempo y es por lo que digo que le admiro, tiene la mentalidad ganadora más impresionante que he visto nunca y algo que sirve de inspiración para todo aquel que quiera emprender algo y el miedo le invada.
Cristiano Ronaldo desde mi punto de vista está muy lejos del talento natural de Messi, un genio del que podría escribir miles de palabras de elogios y agradecimientos. Y sin embargo, en los últimos años Cristiano le está ganando a Messi.
Le gana en la mente, y mira que Messi tiene también una mente ganadora, y tiene además el talento natural, pero Cristiano va aún más allá.
Su mentalidad ganadora es tal, que no concibe otra cosa que no sea ganar. El miedo le puede invadir de pies a cabeza como a todo emprendedor que se lanza a por lo imposible, pero logra controlar sus miedos, logra enfocar su mente y logra llevar a su equipo a la victoria, aunque en ocasiones no la merezcan.
Su fe le hace ganar, su fe hace que la suerte le favorezca, su fe le hace entrenar como si fuese el mejor, su fe hace que todo se alinee para que aunque muchas veces no haga mucho durante un partido, termine siendo el héroe, ya sea rematando un gol en bandeja, metiendo un penalti…
Fácil se podría decir: «¡Sólo empuja balones!». Pero ¡hay que empujarlos! Si fuese tan fácil otros lo harían con esos números. Es incuestionable su grandeza, aunque duela.
En resumen, se podría decir que Messi representa el talento natural, la magia con los pies, y Cristiano Ronaldo representa la mentalidad ganadora.
Cristiano Ronaldo resulta más humano que Messi, más cercano, porque se muestra más vulnerable, más emocional. Messi parece mucho más tranquilo, le dan patadas y se levanta sin protestar, casi nunca se enfada, mantiene la calma, es un genio que parece de otro planeta.
Cristiano en cambio se desespera en cuanto algo no le sale bien, pasa por mil estados emocionales, es un libro abierto en donde se puede ver en su cara la frustración, el miedo, pareciera que a veces se va a echar a llorar cuando algo no le sale bien, como si un niño compungido buscase el abrazo de su madre para que le consuele.
Pero al final gana y eso es lo que lo hace muy muy grande y admirable.
Al final controla su mente. Le pitan un penalti en el minuto 93, se decide todo, si lo falla es ridículo histórico, si lo mete la gloria. Toda la presión sobre sus hombros, a cualquiera le temblarían tanto las piernas que ni podrían caminar hacia el balón para lanzarlo… pero él se concentra, deja a un lado sus miedos, que los tiene, porque es muy pasional, es muy humano, pero los domina. Se concentra en sólo marcar gol, y lo mete por toda la escuadra, con fuerza, con potencia, con toda la seguridad de que va a ganar.
Eso es lo que admiro de Cristiano Ronaldo. Claro que me da asco que haya metido ese penalti, que Buffon se vaya a retirar del fútbol con una tarjeta roja, hasta podría decir que es muy injusto que tras remontar un 0-3, les piten un penalti en el 93, sea o no sea penalti. Es algo que no resulta justo para el fútbol, la prórroga hubiese sido lo épico, en donde la ganase el mejor.
Pero al margen de todo esto, ese penalti, HAY QUE METERLO.
Messi me parece el mejor de la historia, pero tengo serias dudas de si fuese capaz de meter ese penalti. En cualquier caso, si te apasiona el fútbol, seas del equipo que seas, hay que agradecer que seamos contemporáneos de estas dos bestias inigualables, esa batalla que parece no tiene fin, pero que algún día se terminará y recordaremos con nostalgia aquellos años cuando semana tras semana les veíamos jugar, como si fuese lo más normal.
Son talentos únicos de los que hay mucho que aprender. Quizás de Messi no se pueda aprender mucho porque es talento natural, nació con ese Don, solo quedar admirarle. Pero en cambio Cristiano Ronaldo se ha construido a si mismo y es una muestra viviente de que lo más importante es nuestra mentalidad, que tener miedo es humano, que no por tener miedo somos más débiles, sino que lo que nos hace extraordinarios es ser capaces de superar esos miedos y lograr aquello que pocos logran.
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