Sobre cómo Coca-Cola creó al Santa Claus moderno y nos hizo olvidar su verdadera historia

El verdadero origen

Para comenzar esta historia debemos aclarar que el origen del Santa Claus moderno se lo debemos a San Nicolás de Bari, un obispo turco del siglo VI que en vida realizó muchas obras de caridad y al que se le atribuyen muchos milagros.

Nicolás de Bari

Entre sus historias está una que habla sobre un padre que se resigna a que sus tres hijas permanecerán en la soltería por falta de dote, Nicolás de Bari al enterarse de esto decidió lanzar unas monedas de oro (Nicolás había nacido en una familia adinerada) por la chimenea de la familia y así acabar con su pobreza y ayudar a las tres hermanas a poder formar su propio hogar, las monedas cayeron en las medias que las tres hermanas habían colocado en la chimenea para que se secaran, al día siguiente las hijas descubrieron el obsequio con gran alegría ya que no había más pobreza en sus vidas. ¿Te suena familiar esta serie de eventos? Pues, es de aquí que obtenemos el origen de tres puntos claves en la historia de Santa Claus: hombre dadivoso que da obsequios a los más pequeños, su entrada por la chimenea y los regalos en los calcetines colgados en la chimenea.

Mucho tiempo después de la muerte de San Nicolás de Bari, esta historia se comienza popularizar y dio origen a la leyenda de San Nicolás en distintos lugares de Europa, manteniendo su esencia con algunas variaciones o detalles extra. Originalmente su imagen, se representaba un tanto fiel a la imagen de Bari, vestiduras obispales de color rojo, una barba prominente y algunas connotaciones religiosas.

Llegada al territorio americano 

La historia y el personaje se hicieron muy populares en Holanda durante el siglo XVII, para esta época se le comenzó a conocer como Santa Klaus (proveniente de la traducción alemana de Nicolás). Con la migración holandesa a territorio estadounidense, durante este mismo siglo, la historia llegó al corazón de Nueva Ámsterdam (actual Nueva York) y la imagen sufrió transformaciones bastante notorias a través de los años: pasando de ser un Obispo de vestiduras rojas, a un enano amistoso vestido de verde, o un hombre alto y elegante con abrigos, o por último, un viejo alegre que vestía de dorado, verde (siendo este el color predilecto), con manchas, blanco, y en ocasiones de rojo.

Mapa de Nueva Ámsterdam

Con el pasar de los años, el Santa Claus más popular del siglo XIX comenzó a asemejarse a lo que conocemos hoy, un viejo gordo y bonachón, especialmente después de que lo ilustrara el artista Thomas Nast. Fue en este mismo siglo que la Navidad comenzó a convertirse en una celebración aún más popular y su comercialización empezó a masificarse. Y, en medio de esta celebración y comercialización había una figura que destacaba, la de Santa Claus, que llenaba de magia y esperanza la temporada y los corazones.

Ilustración de Santa Claus por Thomas Nast

Coca-Cola entra al juego

A finales del siglo XIX, se fundó una de las marcas más exitosas de la historia Coca-Cola, y aunque sus comienzos fueron buenos, en pocos años alcanzaría logros impresionantes. Una vez entrado el siglo XX, uno de los siglos más prometedores para Estados Unidos, la comercialización en aspectos generales era algo que se estaba volviendo común, pero, la comercialización navideña era algo bastante parecido a una bendición para los empresarios y comerciantes, ya que las ventas que generaban esta festividad eran impresionantes.

Primer anuncio conocido de Coca-Cola, en el que se publicitaba como un tónico para la salud.

A pesar de que Coca-Cola también lograba unas buenas cifras durante esta época, no era suficiente, la compañía quería más. Entonces su equipo se encargó de idear estrategias para hacer que las personas se encariñaran con la marca y que se viera directamente relacionada con la felicidad. Luego de tanto pensar, la respuesta vino a ellos cuando notaran la imagen de Santa Claus en las calles, la emoción de los niños por su historia y el compromiso de los padres por mantenerla. La respuesta había sido respondida, necesitaban crear al Santa Claus perfecto.

Pero originalmente ni siquiera Coca-Cola fue capaz de crear la imagen más popular del personaje. En 1920 Santa Claus, una versión modificada del Santa de Thomas Nast, aparece por primera vez en un anuncio de Coca-Cola publicado en The Saturday Evening Post. El diseño del personaje se mantuvo por varios años, pero su aire de seriedad no permitió que calara en el público.

Haddon Sundblom tomando una Coca-Cola, con una de sus primeras ilustraciones de Santa Claus en el fondo.

Inspirado en el poema “A Visit From St Nicholas” de Clement Clark Moore, Sundblom creó el carácter y los escenarios que protagonizaba el personaje. Para su imagen se inspiró en su amigo, Lou Prentice, un vendedor jubilado, con el que logró que desapareciera cualquier rastro élfico o mítico de su rostro, haciéndolo más humano. Además, lo ilustró más alto, ancho y con una mirada más alegre.

Con esta fusión de magia y humanidad, Sundblom creó un personaje cálido, amigable y entrañable que se convirtió en el icono de la navidad en el mundo. La popularidad del personaje de Santa Claus creció tan rápido y caló tanto en el público que fue simplemente abrumador, y Coca-Cola sabía que debía aprovechar este momento de oro.

La producción de campañas y artículos basados en el personaje se disparó y no se detuvo: peluches, afiches, muñecos, postales, todo lo que puedas imaginar se creó por este personaje y el universo a su alrededor fue creciendo, agregando a otros personajes para pulir la historia. Fue así como Sundblom cambió el marketing navideño para siempre y estuvo durante más de 30 años ilustrando para Coca-Cola primeramente inspirado en su amigo y finalmente en él mismo.

Bola de nieve de colección

Decoración navideña de colección

El personaje llegó a ser tan popular que fanáticos del mismo escribían cartas a la compañía confundidos por algún error en los anuncios, lo que obligó a Coca-Cola a perfeccionar su historia y su personaje.

Los osos polares se han vuelto en compañeros recurrentes de Santa Claus y otro personaje importante en sus campañas navideñas

En pocos años no había quien no relacionara a Santa Claus con Coca-Cola y por ende, Coca-Cola era igual Navidad, ¡habían logrado apropiarse, simbólicamente, de la celebración más popular del mundo! Algo simplemente increíble.

Los años han pasado y el diseño de Santa Claus se mantiene casi intacto, todos los diseños actuales están basados en el original de Sundblom, y será así por mucho tiempo ya que este hombre junto a Coca-Cola, cambiaron el rumbo de la navidad, la historia y el marketing para siempre.