[2] Consejos para emprendedores

Descubre las ventajas y desventajas del outsourcing para las empresas

La actividad empresarial es regida por una serie de procesos a los que sus participantes recurren para que los emporios que les pertenecen funcionen correctamente. Uno de esos procesos es el outsourcing, término anglosajón para denominar a la subcontratación o tercerización, que es una actividad en la cual una sociedad mercantil delega acciones —para las que no está o no se siente capacitada de realizar— a otra sociedad mercantil.

En términos más sencillos, el outsourcing define la contratación de servicios puntuales, por lo general a través de acuerdos de corta duración.

Lógicamente, todas las empresas se especializan en alguna actividad económica, de modo que el outsourcing también podría ser visto como uno de los varios tipos de interacción entre las empresas que existen en el mercado, una interacción en la que no prima la competencia sino la colaboración.

El outsourcing evita inversiones innecesarias en equipo capital e infraestructuras que pudieran no estar siempre operativas

Ejemplos de outsourcing hay muchos, pero para fines prácticos, citemos uno real: Apple (Apple Inc.), una de las multinacionales tecnológicas más importantes del mundo en la actualidad, se especializa en el diseño y producción de equipos tecnológicos; no obstante, para la creación de los componentes electrónicos y el ensamblaje de sus productos, específicamente el iPhone y el iPad, suele subcontratar a una multinacional taiwanesa llamada Foxconn.

Irónicamente, ésta última también produce componentes electrónicos para otras tecnológicas como Microsoft Corporation y Sony Corporation.

No sólo son las grandes empresas las que subcontrantan a empresas más pequeñas, también puede suceder al contrario. Un ejemplo puede ser una pequeña empresa de medios de comunicación impresos que subcontrate los servicios de impresión y distribución de un gran conglomerado de medios de comunicación, porque no cuenta con la maquinaria y el personal necesarios para dichos procesos.

Ventajas del outsourcing

  1. Los costos se reducen: dependiendo de la legislación de cada país, se hace muy caro contratar trabajadores para una actividad determinada; esto implica cargas —como la seguridad social y los sueldos mínimos— que no todos los empresarios están dispuestos a echarse al hombro. Subcontratar no sólo es beneficioso en este sentido, sino que también evita inversiones innecesarias en equipo capital e infraestructuras que pudieran no estar siempre operativas.
  2. Permite a la empresa responder con rapidez ante los cambios del entorno.
  3. Produce mayor eficiencia en los puntos fuertes de la empresa: al delegar ciertas actividades a una compañía a parte, se alivian las preocupaciones, sobre todo si ya se ha trabajado antes con esa otra empresa y si se está seguro de la calidad de su prestación de servicios y de su estricto cumplimiento de los tiempos de entrega.

Desventajas del outsourcing

  1. En ocasiones, y dependiendo del tipo de manufactura o del servicio, el ahorro que se produce al contratar el outsourcing no es significativo. O incluso, podría, a la larga, resultar más barata una inversión en infraestructuras, capitales, trabajadores y capacitación de los mismos para desarrollar un área entera de la empresa. De manera que, a veces, el outsourcing podría significar una reducción de los potenciales beneficios.
  2. Cuando la empresa tercerizada aprende más del producto o servicio que se le encarga, existe la posibilidad de que use ese conocimiento para empezar una industria propia y se convierta en un fuerte competidor.
  3. Falta de pertenencia corporativa de los trabajadores tercerizados: El compromiso, la lealtad, el entendimiento de valores y los objetivos no suelen existir en ellos, aunque sólo se hace muy evidente si la empresa que contrata realmente tiene un ambiente corporativo de calidad y con valores específicos.

La subcontratación no tiene una fórmula concreta. Todo empresario debe conocer a la perfección la situación de su compañía para determinar si sería más eficiente subcontratar o directamente invertir en equipo capital y personal capacitado.

Como vimos en los ejemplos del principio, ninguna empresa, grande, mediana o pequeña, está exenta de hacer outsourcing, de modo que esto de ninguna manera significa debilidad frente a los competidores, al contrario, concentrarse en lo que se sabe hacer y delegar aquello para lo que no se está realmente capacitado va de la mano con la eficiencia y el éxito.

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